Pasarela Cibeles: Hannibal Laguna (Mi primer desfile)

Hola a todos:
Por fin lo conseguí, sí, estuve allí, en la Pasarela Cibeles, presenciando mi primer desfile; era un ir y venir de gente; a pie de pasarela el equipo de Hannibal Laguna, ese fue mi gran bautizo en estas lides, supervisaba por última vez hasta el más insignificante detalle, para que todo saliera a las mil maravillas, nada se puede dejar al azar, detrás de esos 20 minutos que apenas dura el desfile, están horas y horas de trabajo, y de ilusiones, de muchas personas.

A lo lejos veo que se forma un gran revuelo, y comienzan a dispararse los flashes, algún famoso está por ahí, seguro, pero yo no logro ver nada desde mi posición, estoy en la misma grada así que sólo veo sus espaldas y la luz cegadora de las cámaras.
Hay mucho ruido, pero yo siento que los latidos de mi corazón pueden oirse por encima de todo.
Quiero que comience de una vez, ya no puedo esperar más, retrocedí a mi infancia y comencé a tararear: “que empiece ya, que el público se va, la gente…” y por fin, las luces se apagan, el silencio inunda la sala y la música comienza a sonar; aparece bajo un gran foco de luz la primera modelo, el desfile ha comenzado y yo estoy allí, viviéndolo en primera persona, os aseguro que nunca me olvidaré de ese momento y de la emoción que recorrió todo mi cuerpo y me dije “Disfruta del momento”, y eso fue lo que hice.

Puedo deciros que la colección que presentó Hannibal Laguna fue maravillosa, estilo retro, años 40- 50 “total”. El color dominante para el próximo invierno, el “gris” sin duda alguna, ya se ha visto en la pasarela de Nueva York, tenedlo en cuenta y aprovechad estos últimos dias de rebajas y comprad a buen precio alguna prenda de este color (schh… secretillo, en la tienda Piamonte de la calle Claudio Coello de Madrid ayer ví un vestido de punto de este color a unos 59€ aproximadamente).
Del desfile puedo comentaros varias cosas:
-La puesta en escena fue sobria y elegante, como sus propuestas.
-Los vestidos de fiesta, impresionates; aunque hubo alguno largo, dominó el corto; el trabajo de los escotes, con pliegues interminables, debe ser muy laborioso, son verdaderas obras de arte, pero hay que tener cuidado con estos modelos, debes ser alta para poder lucirlos en todo su esplendor, pues debes tener un buen talle, si no los pliegues se convertirian en un solo ”pliegue” y las pequeñitas nos perderíamos entre ellos. Parece un milagro que las modelos lleven bien encajados esos escotes palabra de honor que parecen imposibles, pero que Hannibal Laguna los hace posibles gracias a su maestría, es un genio.
-Me llamó la atención el “ùnico” modelo de zapato que lucieron las modelos, porque sí, era el mismo zapato, en distintas versiones, en ante, en tono negro, gris (el más bonito para mí), o marrón, con incrustaciones de cristales, o sin ellas, anudadas a los tobillos o no, y ¡oh sorpresa! con cuña. Rompedor ¿os imagináis un maravilloso vestido largo en crêpe negro y cuñas?. Pues esta es la apuesta de Hannibal Laguna, sin duda que nosotras estaremos más cómodas que con unos tacones de vértigo, aunque yo personalmente, no lo veo.
De todo el desfile yo me quedo con un vestido recto en tweed, con hilos dorados, que sentaba como un guante, claro está que en el cuerpo de la modelo, habría que ver como sentaba en el mío, un chaquetón de pelo largo y manga corta, creo que era de zorro, pero claro, a esa distancia es imposible verlo bien, qué movimiento tenía... y con un ¡MARAVILLOSOOO! vestido negro, en crêpe, con manga larga, rematada con pedrería, y con un ¡escote en la espalda vertiginosooo!, tan recatado por delante, y tan sensual por detrás, un vestido con sorpresa.

En cuanto al estilismo, no se quien peinó a las modelos pero os aseguro que llevaban unos moños esculpidos, años 40, espectaculares, al estilo Evita Perón, que dejaban la nuca de las modelos al descubierto, este tipo de moños logran estilizar la silueta, vamos que yo lograría, aunque fuera sólo un efecto óptico, añadir unos centímetros más a mi recortada estatura.
En cuanto al maquillaje, su propuesta son piel de porcelana, ojos ahumados, y labios color berenjena, bourdeaux, mates, sin apenas brillos. Me gustó.

El desfile lo cerró una modelo impresionante, con un vestido largo palabra de honor, con un gran lazo en la parte delantera, y corte sirena en tono gris, y unos maravillosos guantes largos, -otra de las apuestas para el próximo invierno, guantes largos, hasta el codo-; desfiló durante 5 minutos, y el pabellón puedo deciros que enmudeció, llenó la pasarela con su presencia e inundó de magia el recinto, parecia que estábamos en presencia de la mismísima Rita Hawoard. Puro espectáculo.

Sección famoseo: Os puedo decir que ví de lejos a Carmen Lomana, es igual que en la tele; a Ivan Helguera (me gusta el futbol), a Sandra Ibarra, a Maria León, a Pitingo, es tan “alto como yo” jejeje… algunas presentadoras de Cuatro, lo siento pero no sé sus nombres, y a muchos periodistas, de la prensa rosa, como Mariñas, y no tan rosa, algún político…, y a mucha gente anónima.

Parece que fue un sueño, pero los sueños a veces sueños no son, a veces esos sueños se hacen realidad. Y así fue.